Una de las recetas más tradicionales de nuestra repostería es el budín de pan. A mí me encanta porque se puede aprovechar el pan que quedó del día anterior y de hecho es mejor hacerlo con pan de uno o dos días, porque queda con mejor consistencia.
Para que este budín sea libre de culpa, es importante: usar leche 0% grasa, usar mantequilla light (solo lleva ¼ de cajita toda la receta), no usar azúcar y usar un pan integral, añejo. Yo lo hice con pan tipo melcochón que se consigue en varias panaderías. Preferiblemente no use pan de bolsa, porque puede que le quede aguado.
Como siempre le recomiendo, comparta, acompáñelo de un lácteo liviano como helados light o leche y no se lo coma todo.
Ingredientes
10 porciones
1 ½ bollos de pan integral tipo melcochón, hogaza de panadería, bonetes, añejo.
3/4 de stevia (si usa azúcar debe añadir el doble)
4 tazas de leche 0% grasa
60 gramos de mantequilla light derretida
4 huevos
1 cda. de vainilla
½ cdita. de canela
½ taza de pasas (opcional)
Preparación
Coloque en un tazón el pan en trozos. En una olla, caliente la leche, el endulzante y la mantequilla y revuelva bien. Retírelo del fuego.
En un tazón aparte, bata los huevos y agréguelos a la leche caliente mezclando rápidamente. A esta mezcla añada la vainilla y la canela. Vierta este líquido sobre el pan en pedacitos, agregue las pasas y déjelo en remojo por unos 30 minutos. Luego con las manos bien limpias o con un procesador de alimentos termine de deshacer los pedacitos de pan que quedaron muy enteros.
Coloque la mezcla en un molde y lleve al horno precalentado a 180°C por 45 minutos o hasta que inserte un cuchillo y salga limpio.